sábado, 7 de marzo de 2015

Esas palabras que no son como deberían

Aquí estoy, hablando sola otro rato. 

Hoy, que he acabado de escribir (que no de corregir) mi proyecto con árboles y animalicos varios, he de dar una pincelada a lo que conté el otro día. Quiero hablar de ese momento en que Almudena Cid ha fallado el lanzamiento y Anna Bessonova se le acerca:
-Jo, casi te sale perfecto.
-Sí, me he desconcentrado un momento y se ha ido al garete.
-Vaya, a mí me ha pasado alguna vez. ¿Has probado tal?
-Sí, pero no me funciona, me da alergia.
-¿Y si pones el tobillo así?
-Ah, eso puede ayudar, mira.
Es un diálogo absurdo, lo sé, sólo quiero transmitir la sensación que se tiene cuando se te acerca alguien que entiende del del tema intentando ayudar, no regodearse aprovechando un error tuyo. Hay mentores durísimos, que corrigen a sangre y fuego, pero que controlan lo que están diciendo y no se pitorrean de ti. Las correcciones con criterio son necesarias.

Yo tengo unos problemas bestiales con el leísmo. Bestiales. Tengo que repasarlo todo treinta veces para asegurarme de que no me he dejado ninguno y, a veces, me quedo atascada en un párrafo invocando al dios de la gramática hasta que veo la luz. Agradezco mucho la ayuda en este aspecto en concreto; me han enseñado varios trucos a lo largo del tiempo para solventar ciertos casos ante los que ya no me aturullo.

Luego están las palabras que no son como deberían ser. Esto es simiente de otro surco.

Hay palabras que he leído y escuchado y mi cabeza ha decidido que eran de una manera. Así, alegremente. Me he pasado años usando esas palabras sin que nadie me corrigiera, hasta leerlas en un contexto distinto o hasta tener un programa de escritura en el ordenador que las subrayara y me hiciera preguntarme qué narices estaba mal con ella si toda la vida de dios había sido así. Tengo una fijación chunga con las erres.

Discusión fue una decepción enorme. Yo siempre había entendido discursión, una erre bien grande ahí, dándole fuerza al enfrentamiento y al intercambio de argumentos. Además, estaba por ahí la palabra discurso. ¿No es discutir acaso, la mayor parte de las veces, soltar tu soliloquio pasando una mierda de lo que te dice tu interlocutor? Eso es lo que se ve en el Congreso todos los días, vamos. Ah, pero resulta que que discusión no viene de discurso sino de discutir. Mierda. Esto lo descubrí ya en bachillerato y se me cayó el alma a los pies.

Cuando me leí El Señor de los Anillos y El Silmarillion, hubo nombres que leí de una forma y así se quedaron. Galardriel, Finglofin... Creo que había alguno más. Estos me dolieron menos, pero siguen grabados a fuego como los nombres "originales" y tengo que concentrarme en leerlos bien. 

Todo glamour y buen hacer.

Luego está el adjetivo ominoso. Esa palabra apareció en mi vocabulario en bachillerato, estudiando el siglo XIX, en concreto una etapa llamada "La década omniosa". Ahí lo lleváis. De mala que fue la década, era todo lo mala que podía ser. Y me quedé tan ancha. Creo que hasta cayó en Selectividad. Yo seguí años y años con el concepto de omniosidad en mi vida, feliz como una lombriz, hasta que leí algo de un presagio ominoso. What? El diccionario me sacó de mi error. Qué decepción.

Para terminar está el usurpador. Esta la he descubierto hace relativamente poco (unos siete años, cuando empecé Canción de Hielo y Fuego). Una vez más, en mi cabeza, la palabra correcta era ursurpador. Sí, sí; ese tío que se hace pasar por oso. 

¡Quierro tu trrono!

Además seguro que venía de cuando algún Ursini, esa familia italiana tan maja, se había colocado en el puesto de otra persona. Vamos, una explicación etimológica y todo. Estaba yo leyendo y lo vi una vez. Pensé que era una errata. Luego, apareció una segunda. Y una tercera. Así que fui a mi amigo el diccionario, una vez más, y volvió a desvelarse la terrible verdad: a la palabra le faltaba esa r que le da la fuerza. No parece igual de chungo un usurpador que un ursurpador. El segundo parece tener de su parte a toda la mafia rusa, dónde va a parar.

¿A alguien más le juega malas pasadas el área de Broca?


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